A Rodrigo Violante
Me habla de átomos entre los cuales no existe el vacío.
Me habla de protones y de neutrones sin diferencias.
Me habla de física cuántica al mover las manos.
Me habla mientras voy cayendo al interior de su garganta.
Me habla sobre cómo ese abrazo que me dopa en realidad ni siquiera me toca.
Me habla sin darse cuenta que ya soy parte de su lenguaje.
Me habla de por qué siempre estamos moviéndonos bajo la luz.
Me habla y nada se mueve excepto la molécula que formamos.
4 commentaires:
mientras te hable, le hables, se hablen (con cualquier parte del cuerpo),todo ira bien.
abrazos.
Hola, Mancebo incauto de las idas voces, a ti acudo para saludar al sol y a la lluvia y al fuego de los cuerpos. Yo pedirte quisiera que tus musos sean anónimos para así verlos gigantes, inalcanzables, al menos en mi lectura, no en tus andanzas. Un beso.
cuentale del hilo de cañamo cocido.
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